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Como sucede cada vez que hay mal tiempo en horas de la noche, esto es ideal para que salgan a “trabajar” los amigos de lo ajeno.
La lluvia, la poca iluminación y el viento, son tres factores fundamentales para dejar un terreno propicio para facilitar el accionar de delincuentes y esto es lo que sucedió este lunes por la madrugada.
En esta oportunidad el blanco fue el Barrio 48 Viviendas, justo al lado del hospital Viejo, donde ya se habían registrado casos similares.
En esta ocasión los ladrnes abrieron dos camionetas estacionadas sobre calle Puchulu. En una de esta sustrajeron herramientas y un matafuego, dejando un desorden total en el interior, en tanto que en la otra, aparentemente hicieron su “trabajo” a las apuradas y tras revolver todo se retiraron, dejando un portatermo con los elementos.
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