El pasado domingo se registró un trágico accidente de lancha en aguas del río Paraná, cuando una embarcación en la que se desplazaban dos jóvenes, chocó el muelle 2 de la toma, que sostiene las bombas de captación de agua que llega a la planta potabilizadora.
Tras el siniestro, uno de los navegantes logró salir a flote y así llegar a nado hasta la orilla, pero su compañero no corrió la misma suerte y desde ese momento es intensamente buscado por efectivos de la Prefectura Naval y la Policía, interviniendo buzos tácticos.
Las tareas se intensificaron en la zona de la Toma Nueva, sumándose familiares y amigos con sus embarcaciones particulares, pero sin suerte.
Tras la pausa de tareas durante la noche, los buzos tácticos, personal de Prefectura, Policía y Bomberos retomaron las tareas de rastrillajes a las 6.30 de este lunes.
El hombre desaparecido es Federico Etcheverry de 36 años, de Paraná, e iba en embarcación “Rey 0770”, la cual quedó destrozada tras el choque contra uno de los pilotes.
A raíz de la busqueda, Obras Sanitarias apagará la bomba de extracción de agua cruda del río para facilitar el trabajo de los buzos, señalándose que el servicio depende de cuánto se extienda la tarea, medida que comenzó a partir de las 7 de la mañana.
Boya conflictiva
Tras el siniestro en Paraná, no faltaron los navegantes del río Uruguay que se manifestaran por el peligro que representa una boya en el ingreso al canal de acceso a Concepción del Uruguay, a pocos metros al este de la Stella Maris.
Señalan que esta es muy oscura y con bajas condiciones de luz se hace complicada de ver, lo que se complica más con malas condiciones del tiempo.
“Lo sucedido en Paraná nos preocupa, ya que acá tenemos esa boya que ya fue impactada son graves consecuencias, pero si una lancha la choca de lleno y a más velocidad, podremos tener que lamentar una tragedia. Es muy oscura y no tiene luz”, dijo el dueño de una lancha que pasa diariamente por esta zona, lo que seguramente debería ser tenido en cuenta.
