La acción contó con medidas en distintas ciudades con una movilización central en el microcentro porteño, concentrando en el Obelisco y luego se marchó al Ministerio de Desarrollo Social. En la provincia de Entre Ríos hubo importantes concentraciones en Paraná frente a Casa de Gobierno, en Concepción del Uruguay en Plaza Ramírez y en La Paz en Plaza 25 de Mayo.
La medida surge como resultado de un agravamiento de las condiciones de vida y del ajuste contra la población pobre. La eliminación del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) en un cuadro de suba de los precios y de crecimiento de la desocupación deja planteado un mayor crecimiento de la miseria social. Lo mismo vale para la supresión de los subsidios ATP, los cuales sin tomar medida alguna por parte del gobierno podrán significar la eliminación de miles de puestos de trabajo en el corto plazo.
Los convocantes denuncian que la inflación ha golpeado con más fuerza en los alimentos de primera necesidad de las familias obreras, sin que mediara ninguna política para elevar los ingresos de quienes perciben algún programa social, y mucho menos de la enorme mayoría que no reciba nada. Además las partidas alimentarias nacionales y provinciales para los comedores populares son insuficientes en cantidad y calidad.
Las tratativas del gobierno con el FMI están dando lugar a un Presupuesto 2021 de ajuste y a al recorte del “gasto social” para tratar de alcanzar las metas fiscales que el organismo internacional exige como una de las garantías para llegar a un acuerdo.
Se trata de una solución de ajuste que aumentará la pobreza y las necesidades sociales y que ya mismo coloca la tarea de organizar una respuesta colectiva, de trabajadores ocupados y desocupados, junto a los jubilados que enfrentan el saqueo de sus haberes y todos los explotados, para derrotar esta política.
Vamos por trabajo genuino, por un seguro universal para el desocupado de 30 mil pesos, apertura de los planes sociales, por tierra y vivienda y asistencia de comedores y merenderos; un bono de $ 15.000 para todos los trabajadores y jubilados que compense la pérdida de poder adquisitivo de este año y permita una mejora en los ingresos, un salario igual a la canasta familiar y una jubilación igual a la canasta de la tercera edad (hoy $ 50.000), en el camino de una plan de lucha y exigimos a las centrales obreras un paro nacional contra el ajuste.