La paciencia al límite: Vecinos reclaman por los daños que producen los camiones de gran porte

El tema de los camiones y su transitar en las calles de la ciudad sigue siendo motivo de polémica para mucha gente. Hay quienes se molestan y argumentan que están trabajando, pero por otra parte, están quienes reclaman porque esta circulación en calles y bulevares causan daños y pérdidas que deben solucionarse con dinero del municipio, o mejor dicho de los mismos contribuyentes.

El viejo sueño de mayores controles y la playa de trasbordo de camiones de gran porte a vehículos de reparto, sigue sin concretarse, mientras los problemas se siguen sucediendo y los riesgos son cada vez mayores si tomamos en cuenta las características de calles, la cantidad de vehículos en la actualidad y la gente que transita.

No debemos olvidar que ya hubo siniestros en los que se debieron lamentar víctimas fatales e importantes daños, algo que no puede volver a suceder jamás.

Barrio Puerto Nuevo

Lo que ocurre en la zona del llamado Puerto Nuevo o Barrio Luz y Fuerza, por inmediaciones de la Escuela Viamonte, es el ejemplo de la falta de organización y control al que los vecinos hacen referencia.

El constante circular de camiones de gran porte de una firma distribuidora de la zona, viene generando serios inconvenientes a los vecinos, causando no solo molestias en el tránsito y a los vehículos estacionados en las angostas calles, sino también daños en veredas, cordones y hasta columnas de alumbrado, eso sin contar lo que a veces sucede en momentos de circulación de chicos que van a la Escuela, cuyos padres deben sortear con sus autos o hasta caminando, el paso de los transportes de cargas.

“Tenemos nuestra paciencia al límite. Venimos reclamando desde hace mucho tiempo a diferentes intendentes y autoridades, pero nadie hace nada. El tema de los camiones de esta distribuidora ya no da para más. Hoy (por este domingo 10) un camión se atravesó en la esquina de Combatientes de Malvinas y Mitre subiéndose a la vereda para maniobrar. Tenemos veredas destrozadas, el pavimento hundido o roto al igual que cordones, daños en columnas de alumbrado y hasta de contenedores. Estamos muy mal y cansados de las promesas. Andan a cualquier hora y muchas veces debemos salir a sacar nuestros autos para que puedan pasar. Algunos vecinos ya reparamos la vereda y seguimos penando. Necesitamos que de una vez por todas se termine con este problema”, dijo un hombre en nombre de todo el vecindario.

Para ver lo que sucede, solo es cuestión de ir al barrio y recorrerlo, el paso de los camiones es algo casi diario y sin dudas necesita que las autoridades busquen la solución y escuchen a estos vecinos.

El crecimiento de la ciudad así lo demanda, pero para eso hay que tomar medidas a corto plazo. Una de ellas fueron algunos limitadores de altura en los bulevares, que en su mayoría fueron dañados y nunca repuestos, limitadores que también deberían estar en otros puntos de la ciudad, no dejando de lado la idea de la Playa de Trasbordo de cargas.