Un joven delincuente, que cumplió recientemente 18 años de edad, fue detenido y se dispuso su prisión preventiva, tras imputársele un asalto a mano armada, cometido en complicidad con otros dos individuos.
Se trata de un muchacho que fue protagonista de numerosos hechos, pero el ser menor lo llevada a quedar en libertad, hasta que finalmente llegó a la mayoría.
El acusado es Heber Gabriel Silva de Almeida, de 18 años, que junto a un menor de 15, el pasado 21 de julio alrededor de las 07.30 hs., asaltaron a un remisero, que iba en un Fiat Sienna, de la empresa Remises Concepción.
Según el relato fiscal, el conductor levantó tres pasajeros que le hicieron seña en bulevar Diaz Vélez y 12 de Octubre, entre ellos el acusado, un menor y otro no identificado, indicándole los mismos que los lleve hasta el frigorífico FEPASA en Uncal y Ara San Juan, tomar por Ara San Juan hasta el barrio La Tablada. Casi llegando a destino, uno de los pasajeros agarró del cuello al remisero del cuello y le apoyó un cuchillo tipo táctico, con serrucho en la parte posterior y filo en la punta, mientras que otro de los pasajeros lo golpeaba con algo similar a una chaira, obligándolo a ingresar al barrio, exigiéndole les entregue dinero, sustrayéndole finalmente, un teléfono celular, una billetera de que contenía documentación, un portatermo y 125 mil pesos, dándose a la fuga. a en forma peatonal.».
Este joven y su cómplice, fueron acusados del delito de “Robo agravado por el uso de arma”, en calidad de coautores (Arts. 45 y 166 inc. 2 del CP).-
El fiscal del caso, doctor Eduardo Santos, consideró que existen riesgos procesales y la posibilidad de que el detenido pueda generar temor en la víctima y peligro de fuga, por lo que pidió la prisión preventiva, lo que fue ordenado por el Juagado de Garantías, por un plazo de 90 días.
Un ejemplo que lo pudo marcar
Sin dudas este muchacho, que venía llevando una complicada adolescencia, no tuvo delante de él un gran ejemplo que lo pudiera llevar por otro camino.
Es que en su grupo familiar, tuvo dos hermanos que se hicieron muy conocidos en el ambiente delictivo y desde muy jóvenes generaban temor y preocupación en la zona donde vivían.
Se trata de Ricardo y Natanael, dos muchachos que cayeron tempranamente en el delito y con antecedentes verdaderamente graves.
Dos homicidios en menos de un año
Ricardo Silva de Almeida, asesinó de una puñalada en agosto de 2012, a Leonardo Javier Ogguier, en el local Estrella de la Noche, pero como tenía 17 años (faltaban tres meses para ser mayor), un Habeas Corpus, del defensor general de la Provincia, Maximiliano Benítez y del defensor de Pobres y Menores de Paraná, Pablo Barbirotto, permitieron su libertad.
Esta medida burocrática y garantista, dejó libre a este peligroso joven, que el 7 de abril del año siguiente, mató de un tiro a Matías Fafrán de 16 años para robarle la moto, un crimen que sin dudas se hubiera evitado si Silva de Almeida, hubiera estadio preso.
Con estos dos crímenes en su historial, finalmente este criminal fue condenado en agosto del 2013 a 22 años de prisión.
La violencia sin límites siguió y mayo del 2015, en la Unidad Penal N° 4, Silva de Almeida apuñaló a un interno que debió ser asistido e internado en el hospital Justo José de Urquiza de Concepción del Uruguay.
Su otro hermano
Por su parte, el otro hermano, Natanael Silva De Almeida, también se vio involucrado en numerosos hechos delictivos de violentas características.
Este joven fue condenado en el 2021 haber ingresado a un domicilio tras escalar una pared de más de 3 metros de altura, para luego romper la traba de una de las ventanas. Al ser sorprendido por el propietario, intentó agredirlo con un cuchillo y huir por el portón de la vivienda. Luego en julio de 2016, fue detenido tras violento asalto a un almacenero amenazándolo con una tumbera, hecho al cual llegan en una moto que habían robado en el hospital momentos antes.
Con todo ese panorama fue creciendo Heber Gabriel Silva de Almeida, viéndose involucrado en numerosos hechos, poro finalmente cayó al cumplir sus 18 años y ahora deberá rendir cuenta ante la Justicia.
