No hubo acuerdo paritario en Buenos Aires y el sindicato de choferes anunció una huelga para miércoles 13 y jueves 14. El lunes, otra reunión entre las partes: pocas chances de que se destrabe la medida.
Este jueves hubo una nueva reunión paritaria entre autoridades nacionales, empresarios nucleados en la Federación Argentina de Transportadores de Automotor de Pasajeros (Fatap) y la Unión Tranviarios Automotor (UTA). Otra vez, no hubo acuerdo por la recomposición salarial que pide el sindicato de choferes, y se anunció un paro de colectivos para el próximo miércoles 13 y jueves 14 de marzo.
Pero se pasó a nueva audiencia hasta el lunes 11 a las 16 horas, con lo cual queda una “esperanza”, aunque escasa, de que se destrabe el conflicto y se levante la huelga. “Se resolvió un cuarto intermedio para el lunes… Si no hay acuerdo (en esa reunión) se parará miércoles y jueves”, el confió a El Litoral Marcelo Gariboldi, secretario general de la UTA Seccional Santa Fe.
La medida afectaría a las líneas urbanas e interurbanas del interior del país, incluido por supuesto, Santa Fe y su zona aledaña.
La discusión en esta instancia en particular es la recomposición salarial para los choferes, pero se enmarca en un conflicto mucho más profundo, que es la crisis del sistema del transporte público de pasajeros por colectivos, luego de que Nación eliminara el Fondo Compensador del transporte para el interior del país.
Qué pasó en la audiencia
Según el acta de la audiencia virtual a la que accedió El Litoral, por Ministerio de Capital Humano estuvo Guido Arocco, secretario de Conciliación; por la parte sindical, en representación de la UTA, Roberto Fernández; y por la parte empresarial (empleadora), el presidente de la Fatap, Gerardo Ingaramo.
Desde la Fatap se manifestó que el estado de situación que se verifica a la fecha “no ha variado sustancialmente en cuanto a la asignación de recursos al sector”, y se advirtió que en varias jurisdicciones las autoridades competentes en la materia “a nivel provincial y municipal no han tomado conciencia de la gravedad de la situación del transporte del interior”.
Los empresarios propusieron a la representación sindical y a la secretaría de Trabajo fijar un cuarto intermedio hasta el día lunes 11 de marzo próximo, “a fin de que la Fatap analice y estructure una posición definitiva con relación a la pretensión sindical y a las reales posibilidades de las empresas que aquella nuclea, en el marco de la buena fe que debe presidir toda negociación paritaria”.
“Rehenes de intereses”
Los representantes de la UTA ratificaron que la negociación salarial y las necesidades de los trabajadores “es la misma”. «Continuamos poniendo a los trabajadores como rehenes de intereses que nos resultan ajenos, mientras en esta puja el tiempo pasa y los daños avanzan. Exhortamos nuevamente a nuestros empleadores y las autoridades públicas a poner fin a esta lamentable posición de poderes«.
Asimismo, “continuaremos bregando donde sea necesario para revertir la situación de nuestros representados y ocurriremos con todas las herramientas que la ley nos brinda para poder llegar a destino con paz social”. Asimismo, «la negativa empresaria a alcanzar un acuerdo sectorial nos lleva a que las medidas de acción gremial se profundicen”.
Con todo, la UTA resolvió un paro de 48 horas en el interior del país, durante los días miércoles 13 y jueves 14 del corriente mes. Y además, “de no tener respuesta adecuada a la pretensión sindical, las medidas continuarán profundizándose hasta tanto se suscriba el acuerdo salarial que los trabajadores demandan”, amenazaron.
Una vez más, lo llamativo fue la laxitud del funcionario nacional obrante en la audiencia. Sólo los instó a empresarios y sindicalistas a “extremar esfuerzos a fin de acercar posiciones superadoras de las diferencias planteadas y explorar alternativas de consenso”.