El FIT-U habló de las propuestas para nuestra ciudad

El Frente de Izquierda y de los Trabajadores – Unidad (FIT-U) presentó en Concepción del Uruguay su lista, Unidad de Luchadores y la Izquierda, de cara a las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO).

Fue durante una conferencia de prensa ofrecida en La Ris por Sofía Cáceres Sforza, Pablo Amarillo, Fernando Arregui y Diego Piva, precandidatos a gobernadora de Entre Ríos, a intendente de Concepción del Uruguay, a diputado nacional y a concejal uruguayense, respectivamente.

En la oportunidad, Amarillo expresó que “el Frente de Izquierda es la verdadera opción porque está en las antípodas y en la vereda opuesta de todos aquellos que nos han gobernado y nos han traído a esta situación. Por eso, el debate que se da con la gente es muy sencillo y a la que le decimos que los responsables de haberla traído hasta acá no la van a sacar. Ellos son lo que la hundieron; entonces, ¿por qué ahora harían algo distinto? Si ésa es su política: acá hay un 10 por ciento que, cada vez, es más rico y el resto la miramos desde afuera. No puede ser que ahora el que trabaja en blanco sea pobre. La línea de pobreza está en 240.000 pesos y el salario promedio en la Argentina es de 190.000”.

“También queremos dejar blanco sobre negro respecto a los candidatos locales: tanto (las listas de) Lauritto, Bisogni como Perdomo son colectadoras y parte del armado de (Sergio) Massa. ¿Ahora qué van a prometer? Si van a ser parte de un proyecto que va a liquidar los derechos de la clase trabajadora. Ni hablar de todas las opciones de Cambiemos. Y, sobre el fenómeno de Milei, primero decir que es evidente en las elecciones provinciales que han pasado no se ha mostrado un fuerte apoyo a él. Milei plantea lo mismo que los otros pero de una manera más acelerada. Cuando él dice: ‘Reivindico al menemismo, muchos jóvenes no conocieron lo que se vivió en los 90. Por eso los invitamos a hablar con sus padres para ver cómo terminamos en la crisis de 2001 para atender adónde nos llevará Milei. Pero, también, adónde nos llevarán las otras fuerzas, quizás, en un tiempo más prolongado”, dijo.

En lo que hace a las propuestas locales, señaló: “Así como defendemos al conjunto de la clase trabajadora a nivel nacional, provincial y municipal, no puede ser que en los bulevares, mire para donde se mire, vea la construcción de edificios, torres, departamentos y locales, y los mismos carteles: de cuatro o cinco desarrolladores inmobiliarios y, por el otro lado, el que trabaja no puede acceder a un terreno de 10 por 20. Por eso decimos que hay que resolver el problema de la tierra. Si logramos la Intendencia, nos sentaremos frente a Catastro y empezaremos a lotear los terrenos fiscales, estableceremos un criterio de acceso y el pago no podrá superar el 10 por ciento de los ingresos. Mientras que los que gobernaron permitieron que a la tierra fiscal acceda un grupo de desarrolladores inmobiliarios, plantemos que debe acceder la familia trabajadora. Por otro lado, hablamos con claridad el tema del impuesto a la luz. Participamos de la Asamblea contra el Tarifazo y no puede ser que se cobre el alumbrado público atado al consumo eléctrico, porque si se consume más o menos energía, siempre se tiene el mismo foco afuera de la casa. Es decir que convirtieron al alumbrado público en un impuesto para saquear los bolsillos de la población. Mientras tanto, desde el Gobierno reconocieron que las empresas no lo pagan; sí, en cambio, un desocupado”.

“Por otro lado, vemos cómo ha avanzado la droga en los barrios. Obviamente avanzó con la complicidad del Estado. Cómo puede ser que cualquier chico de 15 años sepa dónde comprarla, lo miso que el fiscal, el juez, el comisario, el intendente y los militantes. Por eso decimos que hay una clara complicidad y un sistema de salud que no da ningún tipo de respuesta. Como docente, vemos permanentemente el problema de las adicciones en la adolescencia y cómo una familia trabajadora no puede acceder a un tratamiento porque es muy costoso enviar a los hijos a las clínicas de rehabilitación. Por eso, decimos que el sistema de salud y las salas municipales deben tener los profesionales para abordar la temática de las adicciones y de la salud mental. Y, por supuesto, que no seremos cómplices de ningún apriete de las redes del narcotráfico. Justamente, en el Polo Obrero hemos tenido en Rosario compañeras asesinadas a manos de los narcos”, añadió.

En otro pasaje, Amarillo aludió, además, al “profundo desprecio de los distintos intendentes sobre los municipales. La Comuna está plagada de empleados, que cumplen sus tareas, pero que están por contrato, bajo el monotributo y por las cooperativas que, de eso, no tienen nada. Porque en una cooperativa, las ganancias se comparten por igual, pero las han constituido como una manera de precarizar a los trabajadores. E, incluso, el Municipio hace trabajar a las personas bajo los programas sociales de Nación. En esto, decimos con claridad: quien realiza tareas municipales debe pasar a la planta. Pero: ¿de dónde saldrían los recursos? Para eso se debe terminar con la sangría de las permanentes licitaciones para todo. Antes, las cuadrillas municipales efectuaban el pavimento, gran parte de la obra pública, la instalación de los servicios y el cuidado de los espacios abiertos con máquinas e insumos del Estado local pues aquí tenemos la planta asfáltica. Pero dejaron todo eso abandonado porque evidentemente a las gestiones les ha servido licitar y enviar el dinero a las tres o cuatro empresas privadas. Es decir que tenemos una enorme cantidad de recursos que se va a pocas manos. Esos recursos, concentrados en manos de la Comuna, permitirían hacer la obra pública, abaratar sus costos, aumentar el salario de los municipales, que no puede estar por debajo de los 300.000 pesos, y pasar a planta a todos aquellos que cumplen tareas pero que hoy están precarizados bajo el sistema de las cooperativas y el monotributo. Ésas son algunas de las propuestas”, aseveró.