Desde un tiempo a esta parte, la llamada Liga Promocional de Fútbol de Concepción del Uruguay, está en la mira de muchos. Sin el abal de la Liga Uruguayense, esta siguió compitiendo, no comando con las mínimas normas de seguridad, algo impensado cuando tanto se exige a los verdaderos clubes.
Desde la asunción de la actual Comisión de la Liga de Fútbol, se solicitaron algunas medidas para poder realizar el torneo Promocional, como se seguridad, prohibición de venta de bebidas alcohólicas y personería jurídica, pero la negativa de los responsables, llevó a ale esa Liga se abriera y el Torneo se desarrollara independientemente, con los riesgos que ese representaba.
Esto finalmente se pudo ver el pasado fin de semana en la cancha de Parque Sur, en el encuentro entre Peñarol y Defensores de Malvinas, donde inadaptados e inadaptadas, en una actitud totalmente repudiable y salvaje, atacaron a golpes al árbitro Claudio Larrea, al que llegaron a arrojarle agua caliente, sumándose al ataque criaturas de unos 9 años.
Lo mas grave es que en el lugar no se contaba con presencia policial, y que este incidente no pasó a mayores, porque Larrea logró escapar de sol salvajes agresores y porque no reaccionó.
Lo habían anunciado
Los graves incidentes ocurrido este fin de semana, ya habían sido anunciados oportunamente por el presidente de la Liga de Fútbol, doctor Facundo Garmendia, cuando asumió y solicitó a los organizadores (simples equipos de barrio sin autoridades representativas) que se organizaran y esto fue motivo de separación.
Lo ocurrido no es el primer caso de violencia en esta Liga, ya hubo otros inconvenientes y en una oportunidad, un árbitro fue amenazado con un arma de fuego y hasta gatillado, por lo que sin dudas esto demanda urgentes medidas, antes de que se deba lamentar una tragedia.
Hablo Claudio Larrea
Este lunes, 03442 fue a la casa del árbitro agredido, quien aceptó dialogar y contar lo sucedido, sin dudas un hecho que no tiene explicación, ni justificativo alguno para una sociedad civilizada.
Con casi 9 años en el arbitraje, hoy dirigiendo en la Liga de Colón y ocasionalmente haciéndolo en la Promocional de La Histórica, Larrea nunca tuvo que vivir semejante momento en el cual no supo cómo podría terminar.
“Era un partido normal hasta que cobré un penal a favor de Peñarol que rebotó en el travesaño y después vino el cuarto gol de Malvinas. Todo estaba muy violento entre los jugadores y con el resultado ya definido, decidí suspender el encuentro por seguridad. Fue en ese momento que ingresaron a la cancha y yo pensé que venían a festejar, pero fue un ataque directo a mi persona”, dijo el árbitro.
Larrea dijo que se preocupó mucho al ver como mujeres lo atacaban principalmente, sumándose luego algunos hombres y llamativamente hasta chicos de no más de 9 años, expresando asombrado “Qué les están enseñando a esos niños. Cada día se va más violencia. No podía reaccionar, porque no quería que después se diga que yo fue violento, Me tuve que contener, sino yo terminaría siendo el malo de la película. Esto es inexplicable y no había motivo alguno. Compañeros míos me lo dijeron y si hubiera habida algo cuestionable, no se justifica lo que hicieron. Ve a un nene hacer esto es preocupante y lamentablemente eso también sucede en el fútbol infantil. Algo está fallando”.
Larrea dijo que recibió el llamado solidario del doctor Facundo Garmendia y de sus colegas, agregando que este torneo se disputa como un simple torneo de barrio, sin ninguna seguridad y con venta de alcohol.
“Yo ya radiqué la denuncia y no pensamos dirigir más en esta Promocional. Hoy estoy bien, ya repuesto de la parte emotiva, pero con numerosos golpes y dolorido. Es lamentable ver a una sociedad tan violenta y esperemos que esto no se repita”, finalizó.
Lo sucedido debería tener consecuencias y el replanteo de seguir con este Liga en actividad, por lo que tanto las autoridades políticas como de seguridad y judiciales, deberían acordar los pasos a seguir antes de que se produzca una desgracia.
