La causa que se le sigue el ex integrante del Movimiento Evita y la JP, Daniel Castro de 32 años, está transitando la última etapa y este lunes se supo que la Fiscalía se constituyó para presentar finalmente el requerimiento de elevación a juicio.
A Castro, que fuera expulsado tras conocerse que estaba involucrado en causas de abuso sexual ocurridas el 28 de noviembre de 2015 y la segunda el 10 de septiembre de 2017, lo representa actualmente el doctor Sebastián Arrechea.
En esta oportunidad, la Agente Fiscal Nº 4, doctora María Albertina Chichi, en el marco del Legajo N° 4309/17 y su acumulado N°5240/19 caratulado “Castro Daniel Adrián S/ Abuso sexual con acceso carnal” (dos hechos) interesó su remisión a juicio y ofreció las pruebas, en audiencia realizada ante el Juez de Garantías, doctor Gustavo Díaz.-
Los hechos y calificaciones legales
Como ya se informara en oportunidades anteriores en 03442, los hechos atribuidos al imputado, son el de haber abusado sexualmente de una joven de diecinueve años de edad, quien si bien inicialmente accedió a mantener relaciones sexuales denunció que luego fue forzada a otras practicas a las que fue sometida pese a negarse y pedirle al agresor que se detuviera, y luego obligarla a practicar sexo oral. Según señala el expediente, esto fue filmado por el agresor que volvió a agredirla sexualmente causándole lesiones. Hecho ocurrido el 10 de septiembre de 2017, alrededor de las 4.30 horas.
Por otra parte, se lo imputa de haber abusado sexualmente con acceso carnal de otra joven de 16 años de edad, en fecha 29 de noviembre de 2015, en circunstancias en que luego de que cenaran junto a otros integrantes de la Agrupación política JP Evita con motivo de la reinauguración del SUM de la Cantera 25, se dirigieran al local de la agrupación ubicado en calle 9 de Julio en cercanías de la terminal de ómnibus de esta ciudad, donde permanecieron un rato bebiendo. En un momento dado la joven comenzó a sentirse mareada solicitándole a Castro en ese momento de 26 años, que la llevara a su casa, pero aprovechando que la misma se quedó dormida, Castro desvió el trayecto y se dirigió a Avda. Tavella y camino de ingreso a Balneario Banco Pelay, estacionó su automóvil comenzó a abrir el sobre de un preservativo momento en el cual Antonella despertó y al ver la situación comenzó a gritar, intentando salir del auto, pero pese a esto fue abusada, tras lo cual el imputado la habría amenazado para que no contara lo sucedido porque tenía contactos.
Tales conductas, encuadran en los delitos de “Abuso sexual con acceso carnal” -art. 119 tercer párrafo del cód. Penal- dos hechos, en concurso real -Art. 55 CP.
La Fiscalía presentó todos los elementos recabados en esta IPP, considerando que ya está todo listo para pasar a la etapa de juicio oral, que (como se informara oportunamente en 03442) no irá a debate ante jurado popular, dado que no está en el marco de penas superior a los 15 años.
En la audiencia estuvieron presentes el defensor particular de Daniel Castro, doctor Sebastián Arrechea y el querellante, doctor Maximiliano Chorne, que en ambos casos se opusieron a pruebas solicitadas por el defensor, como ser la reconstrucción del hecho y la declaración en juicio del doctor Mauricio Antonio Rebord, ex médico forense de la ciudad de Colón.
En el caso de Arrechea, presentó al menos unos 17 posibles testimonios en debate, sumado a otros elementos como ser documentación, videos y capturas de imágenes.
Por el momento resta que el juez Gustavo Días se expida y confirme definitivamente la elevación al juicio oral, para luego designarse Tribunal y fecha del mismo.
Castro siempre negó los hechos
Como se recordará, comenzada la instancia judicial, 03442 dialogó con el imputado Daniel Castro, que junto a quien era en ese momento su abogado, el doctor José Peluffo, se defendió de los escraches en su contra y aseguró ser inocente, reconociendo haber mantenido relaciones con la joven que lo denunciara primeramente, pero sostuvo que fueron consentidas y dijo que luego comenzaron a amenazarlo telefónicamente por lo que supuestamente había hecho y se sucedieron los escraches.
En su momento Peluffo, sostuvo terminantemente que no habían elementos que inculpen a su cliente, haciendo hincapié en lo llamativo que resulta con la rapidez que se extendieron los escraches y la circulación del caso en las redes sociales.
Ahora habrá de esperarse lo que pueda pesar sus dichos y los elementos que aporte la defensa en su batería de pruebas, para sostener su inocencia, debiéndose recordar que es la Fiscalía la que debe demostrar con certeza la culpabilidad del imputado ante el Tribunal de Juicio.