Lanús y Rivadavia disputaron la final de la categoría 2007 y, de la misma manera, se despedían del Gallito Tricolor para siempre ya que el próximo año se sumaran al fútbol mayor.
La final era disputada, piernas fuertes, discusiones, algún reclamo al árbitro. Rivadavia saco ventaja marcando dos goles pero sobre el final el Granate, con mucho corazón, encontró su gol y la esperanza de llegar a los penales.
El partido ganó en emoción, no se regalaron nada, disputaron cada pelota con firmeza e intensidad. Finalmente la victoria fue para el Trico, pero los campeones serían todos, luego de algunos minutos llegaron juntos a recibir sus premios, subieron al escenario y entre bromas y risas recibieron sus trofeos y nos dejaron esta foto para la reflexión.
Fue un gran fin de semana en el predio de mates, charlas, goles, muchos partidos pero más que nada una oportunidad para reencontrarse toda la familia del fútbol. El trabajo fue arduo, intenso, pero la alegría de los gurises en cada festejo, en cada gol, con cada trofeo, hizo que todo valiera la pena.
Volvió el «Gallito» y pandemia de por medio está mas saludable que nunca para felicidad de toda la familia Tricolor. Solo queda dar las gracias a cada uno de los que colaboraron, a toda la gurisada que participo y le puso tanta emoción a cada partido, a los profes, papás, mamás, abuelos… La fiesta se logró con la participación de todos.
Ojala la foto y el festejo de los gurises 2007, que ya van dejando de ser niños, nos sirva de reflexión para que el fútbol y los amigos siempre estén por encima de cualquier disputa, discusión o resultado, sobre todo entre los más chiquitos, los que solo deben disfrutar de jugar a la pelota… #vamostricolores #siempretricolores