El legislador nacional Gustavo Hein, afirmó que la presión tributaria que tiene el campo le impide “salir a flote ante circunstancias adversas”.
Nuestro país atraviesa la peor sequía de los últimos 60 años. Ante esto el diputado nacional, Gustavo Hein comentó que “estas condiciones hostiles dejan en evidencia que la economía Argentina pende de un hilo, dado que cuando una actividad económica necesita ayuda, el Estado no puede asistirla ni mermar la presión tributaria que ejerce sobre ella”.
“El año pasado discutimos el presupuesto, y más allá de los datos poco serios que presentó el gobierno, el punto más preocupante es la presión fiscal que sabemos se terminará ejerciendo sobre muchísimas actividades económicas para suplir las falencias de los números del Estado. Gastamos mucho, la presión tributaria es muy elevada y ante las dificultades, el Estado pierde capacidad de reacción”, afirmó Hein.
“No tomamos con seriedad este asunto. El gobierno argentino prometió una ayuda económica para ciertos sectores de la agroindustria, pero lo cierto es que no se habla en ningún momento de la presión fiscal que se ejerce sobre estas actividades. Algo que no sorprende dado que en plena pandemia las actividades que no producían debían seguir afrontando sus impuestos normalmente, en este caso no es distinto, el campo no puede cumplir con las expectativas impuestas y se lo va a presionar pese a ello, es frustrante”.
“Lo que más preocupa es que este problema es patológico, la lógica es presionar hasta que la Argentina que produce se canse y deje de hacerlo. Si al argentino que sale todos los días a generar empleo o recursos para su sustento diario se lo trata de esta manera, la proyección para los próximos años se vuelve muy desalentadora” culminó el legislador.