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El empresario argentino-alemán dijo el jueves por la tarde que se iría al río y ya no se supo nada de él; vive en Paysandú, donde tiene sus negocios por US$ 35 millones
Mientras continúa la búsqueda del argentino-alemán Eugenio Schneider (81), quien se ausentó en la tarde del jueves y ya nada más se supo de él, la Prefectura encontró un cuerpo a orillas del río Uruguay e investiga si se trata del empresario.
Tal como publicó El Observador de Uruguay, el vocero de la Armada de ese país, Alejandro Chucarro, se comunicó con el prefecto del puerto de Paysandú para comunicarle el hallazgo, que habría ocurrido sobre la costa argentina en la isla Dolores, próximo al kilómetro 163 del río, tras lo cual fue llevado al Puerto de Concepción del Uruguay por la Prefectura Naval, donde esperaba la fiscal de turno, doctora Gabriela Seró.
“Según la complexión física y descripción, podría coincidir con la persona buscada”, indicó el funcionario al medio uruguayo.
De acuerdo con lo que se informó hasta el momento, el cuerpo fue hallado por efectivos de la división de Concepción del Uruguay de la Prefectura Naval Argentina, que estaban colaborando en las tareas de búsqueda.
Schneider, quien compró un frigorífico fundido en 2000 ubicado en Paysandú y lo transformó en un negocio que exporta a decenas de países, se ausentó en la tarde del jueves y desde ese momento se desconoce su paradero. “Me voy al río”, había dicho a sus allegados.
Nacido en Buenos Aires en 1940, vivió hasta sus 22 años en la Argentina, donde estudió Filosofía y Letras en la Universidad de Buenos Aires, y tuvo de profesor de literatura inglesa nada menos que a Jorge Luis Borges.
El hombre vive con su esposa, y gran parte de su familia se encuentra cerca, en la localidad Casa Blanca de Paysandú. En una entrevista de 2015 dijo que tenía ocho hijos, 18 nietos y diez bisnietos.
