En la actualidad, con el aumento de las actividades virtuales y con el crecimiento de las plataformas de trabajo a distancia, contar con un buen servicio de internet es fundamental para llevar a cabo tareas básicas.
Incluso, en muchas ocasiones, de nuestro servicio de internet puede depender el desempeño académico (ya que muchos cursos se están impartiendo de forma virtual) y también puede afectar a nuestro desempeño laboral, ya que las empresas están realizando una transición hacia el trabajo a distancia.
Es por estos motivos que resulta esencial poder encontrar un servicio que cumpla con nuestras expectativas y que se adapte a nuestras necesidades. Así como también es muy importante tener en cuenta algunos aspectos que pueden cambiar la experiencia de uso que tengamos a diario y pueden evitarnos muchos inconvenientes o molestias.
Por lo tanto, si quieren comprender mejor de qué manera elegir un buen servicio de internet y qué hay que tener en cuenta con respecto al funcionamiento del internet wifi, a continuación, les vamos a contar todo lo que necesitan saber. Así como también les vamos a dar algunos consejos para elegir el mejor servicio para ustedes.
El tipo de conexión, un aspecto fundamental
Muchas personas le dan mucha más importancia al ancho de banda que al tipo de conexión y a la calidad del servicio. Sin embargo, en el uso diario que puedan realizar, es este factor el que va a tener el mayor peso al momento de determinar en líneas generales la calidad de un servicio.
La mejor conexión disponible es a través de fibra óptica, pero muchas veces este servicio no está disponible en algunas regiones debido a que no llegan las centrales de distribución y, además, su instalación es más costosa. Por lo tanto, se emplean cables coaxiles comunes.
Este otro tipo de conexiones no son malas mientras la empresa cuente con un buen servicio de mantenimiento y con servidores rápidos. Es decir, que, frente a las interferencias, a las malas condiciones climáticas o ante fallos en el sistema, pueden repararlo rápidamente a fin de no cortar el servicio.
Una forma de saber esto es consultando con personas que ya tengan ese servicio específico. Aunque también pueden buscar opiniones en foros y en otros medios de comentarios al respecto de las empresas de internet.
Velocidad o ancho de banda
Obviamente que el ancho de banda tiene mucha relevancia y puede determinar también la experiencia de usuario general que tengamos. Mientras más rápido sea el servicio, mejor, pero tampoco sirve de nada contratar una velocidad demasiado elevada si no se va a aprovechar al máximo todo su potencial. Algunas de las alternativas más convenientes son estas:
- 25 MB: es la velocidad más baja que se ofrece en la actualidad a fin de mantener un funcionamiento estable. Por debajo de esta línea, sería demasiado lento. Si le dan un uso ocasional y no usan muchos servicios de streaming ni descargan archivos, es una opción conveniente.
- 50 MB: es un rango intermedio y aceptable en la escala. Ofrece una buena velocidad para consumir contenido por streaming y para descargar, aunque a veces se queda un poco lento en comparación con otras opciones.
- 100 MB: es la opción más recomendada para una casa en la que hay varios dispositivos conectados en simultáneo. Ofrece una velocidad más que recomendable.
- + 100 MB: dependiendo de la empresa, puede haber servicios de 300 MB e incluso de hasta 1 GB, pero estas alternativas son más recomendadas para un uso profesional o para las empresas, ya que, de lo contrario, no se estaría aprovechando todo su potencial.
Por lo tanto, si están buscando un buen servicio de internet wifi, les recomendamos que consideren estas opciones según cuál sea su forma de uso. Ante cualquier consulta, igualmente pueden asesorarse con algún experto en el área.
Al contar con un buen servicio de internet, su experiencia de uso en líneas generales mejorará exponencialmente y podrán aprovechar mejor su tiempo y lograrán un mejor desempeño en diversas áreas. Por lo que este aspecto tiene un gran impacto en sus vidas y, en tiempos de virtualidad, es mucho más importante de lo que parece.