Este 26 de octubre, la Fundación de la Hemofilia cumple 77 años de su nacimiento. Desde sus inicios la Fundación tuvo como objetivo primordial brindar un tratamiento de calidad para las personas con hemofilia de nuestro país, asistiéndolas y acompañándolas junto a sus familias en las diversas etapas de la vida.
La Fundación de la Hemofilia Argentina es una de las más antiguas del mundo. Es cofundadora de la Federación Mundial de la Hemofilia, además de ser centro de entrenamiento para profesionales extranjeros de las diversas especialidades que tratan esta patología (hematólogos, traumatólogos, kinesiólogos, odontólogos, hepatólogos, infectólogos, psicólogos, etc.).
La hemofilia es una enfermedad de carácter hereditario, se debe a la ausencia o disminución de un factor de la coagulación. Si la deficiencia es de factor VIII se denomina ‘hemofilia A’ y si es de factor IX se denomina ‘hemofilia B’. Dichos factores participan del sistema de coagulación y actúan reparando el vaso sanguíneo dañado. El déficit de estos factores determina la presencia de sangrados que pueden afectar cualquier parte del cuerpo, pero principalmente y en forma característica afecta las articulaciones (codos, rodillas y tobillos) además de los músculos. Estos sangrados pueden ocurrir en forma espontánea, luego de una cirugía o cuando la persona sufre una lesión.
Un paciente con hemofilia severa debe seguir un tratamiento de profilaxis con factor endovenoso varias veces a la semana, para así evitar daños irreversibles en sus articulaciones, así como prevenir otros sangrados que puedan poner en riesgo su vida.
Es importante destacar la labor diaria de la Fundación de la Hemofilia, que permite que hoy la comunidad de pacientes cuente con un tratamiento adecuado, sostenido y de calidad. Es por esta tarea y por los desafíos futuros que festejamos este día con gran entusiasmo y dedicación.