Fue condenada la ex secretaria de Medio Ambiente Romina Picolotti a tres años de prisión de ejecución condicional

El Tribunal Oral Federal 6 consideró probado que pagó con fondos públicos gastos particulares por casi siete millones de pesos, que deberá devolver; está en Miami y podrá quedarse allí si se presenta todos los meses en el consultado argentino.

La exsecretaria de Ambiente Romina Picolotti fue condenada este lunes a tres años de prisión en suspenso por el delito de fraude en perjuicio de la administración pública, por haber pagado con fondos estatales gastos personales de ella y de su familia. La condena incluyó también la inhabilitación a perpetuidad para ejercer cargos públicos.

El Tribunal Oral Federal N° 6 le impuso la obligación de devolver al Estado casi siete millones de pesos, actualizados, que es lo que se calcula que gastó en su beneficio, una vez que la sentencia quede firme. Además, los jueces elevaron la fianza hasta esa suma.

Picolotti, que está radicada en los Estados Unidos, no está obligada a volver al país. Seguirá en libertad con la obligación de presentarse mensualmente en el consulado argentino en Miami. En caso de incumplir, se le ejecutará la fianza y será declarada rebelde.

La exsecretaria de Ambiente fue condenada por el Tribunal Oral Federal N°6, integrado por los jueces Sabrina Namer (que leyó la condena), Néstor Costabel y Rodrigo Giménez Uriburu. El fiscal del juicio, Diego Luciani, había pedido para Picolotti una pena de tres años y nueve meses de prisión.

Picolotti participó del juicio por Zoom y fue por esa vía que esta tarde escuchó el veredicto en su contra. No pronunció palabra y solo se advirtió que parpadeó cuando escuchó la condena. Para participar de esta reunión virtual eligió un fondo de pantalla astral, como de cielo nocturno, y su imagen aparecía allí recortada.

Por la mañana, había pronunciado sus “últimas palabras”: dijo que no había pruebas que la comprometieran y pidió su absolución.

Los gastos por los que fue juzgada Picolotti incluyen desde compras de farmacia, regalos y una piedra aromática, hasta decenas de pasajes de avión y vuelos charters, almuerzos en Sushiclub y noches de hotel para su familia.

Fuente La Nación