Malestar por escrituras y daños en la estación de Caseros

Resulta lamentable encontrarnos nuevamente con conductas inapropiadas en detrimento de los espacios públicos, muchos de ellos de gran valor histórico y cultural que con gran esmero y esfuerzo son mantenidos por el Municipio.

Es importante, que las personas tomemos conciencia de la necesidad de cambiar el comportamiento inadecuado, asumiendo cada uno esa decisión como nuestro aporte individual, de manera que sirva de ejemplo a otros que deseen sumarse a la transformación de nuestra sociedad, a través de una conducta ciudadana que beneficie a todos por igual.

No es difícil advertir, la urgente necesidad que vive nuestra sociedad, de respetar las normas mínimas que deben identificar la conducta ciudadana. Sin duda, esto nos facilitaría la convivencia con los demás, pues son pautas que se establecen con el fin de fijar ciertos límites, para guiar la forma como actuamos frente a situaciones que pueden afectar a los otros. Este, es un asunto del cual no nos debemos desentender, pues a pesar que es un compromiso de todos, muchas veces obviamos su importancia y caemos en su incumplimiento.

Del mismo modo, sería ideal que todos nos propongamos acatar el orden, así como demostrar un comportamiento cívico, respetar los turnos en las filas, ceder el paso al conducir, no generar desperdicios en lugares públicos, cuidar los bienes comunes, entre otros ajustes importantes en nuestra conducta. De esta manera, estaremos aportando un significativo grano de arena al esfuerzo de mantener la armonía ciudadana.