Un hecho lamentable se conoció este sábado en Concepción del Uruguay, del cual fue involuntariamente protagonista una criatura de solo 2 años, que fuera dejada sola encerrada en una vivienda, lo que demandó la intervención de personal policial.
Si bien se desconocen los entretelones de la situación familiar, se supo que pasadas las 11 horas, personal del Comando fue alertado por un llamado telefónico, de que en el domicilio de Doctora Ratto 847, había una menor llorando pidiendo ayuda, la que al parecer se encontraba sola y encerrada en una casa.
Al llegar al lugar los uniformados hablaron con un hombre que se encontraba visiblemente alterado porque dentro de la vivienda indicada, estaba una menor llorando desconsoladamente aparentemente sola.
Ante la situación, el jefe de Calle presente en el lugar , trató de ser atendido por algún mayor, por lo que llamó a la puerta en reiteradas oportunidades, pero ante la falta de respuestas sacó un plástico que estaba sobre la ventana y pudo ver a una menor de no más de dos años, llorando y que en su léxico lógico de la edad y la situación, pedía salir.
Esto motivó a los agentes Filipuzzi y Hadad, a hablar con la niña y así distraerla jugando para lograr calmar su estado de ansiedad, mientras el oficial a cargo solicitaba la presencia de personal de Comisaria de Minoridad y Violencia Familiar, para así proceder a entrar a la vivienda y realizar la contención de la criatura.
Fuentes indicaron a 03442 que el oficial a cargo llamó a la Fiscalía de turno, a cargo de la doctora Ana María Presas, notificando lo sucedido y avisando de que procederían a entrar a la casa, medida que se haría ante testigos civiles, recibiendo la orden de la fiscal para obrar en consecuencia y en resguardo de la criatura.
Ya con la presencia de personal de minoridad y la abuela de la menor de solo 2 años de edad, el oficial a cargo trató de abrir la puerta, pero al no ser procedió a violentarla.
Según señalaron a 03442, al ingresar encontraron a la menor sobre una cama, visiblemente nerviosa y agotada de tanto llorar, la que estaba sola, enteramente mojada, con pañales que denotaban tener varios días de colocados, destacándose que se observaba que estaba en un ambiente peligroso con deficientes instalaciones eléctricas.
Tras lo actuado, se dispuso la entrega de la menor a la abuela, con la intervención de personal de minoridad para que sean trasladas a la dependencia para la correcta intervención y resguardo de la niña, en coordinación con el Juzgado de Familia.