Con la certificación de técnicos del Senasa, el producto para consumo humano fue faenado en un establecimiento de Cruz del Eje, habilitado para la actividad.
Por primera vez desde Córdoba, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) certificó la exportación de carne caprina con destino a Sri Lanka.
De las 51 toneladas de carne de cabra con hueso congelada con destino a consumo humano acordadas para exportar al país asiático, técnicos del Centro Regional Córdoba del Senasa llevan certificadas durante octubre, 38 toneladas – de las cuales 17 partieron hoy-.
En noviembre próximo está previsto completar el total con el último envío según declaró el frigorífico exportador ubicado en Cruz del Eje, localidad ubicada a 130 kilómetros de la capital provincial.
El frigorífico, cuyas instalaciones fueron habilitadas recientemente por el Senasa para exportar este tipo de producto, fue visitado y recorrido por funcionarios del Ministerio de Agricultura y Ganadería provincial.
Consultado sobre la importancia de este tipo de exportación, Patricio Flores, vicepresidente del frigorífico comentó que “se trata de un hecho de gran trascendencia ya que en Argentina la cabra no es un animal que se consuma de manera habitual” además destacó que “la posibilidad de darle valor a esta economía regional significa un plus adicional para el sector”.
Finalmente, Flores ponderó el trabajo del coordinador de Inocuidad y Calidad Agroalimentaria del Centro Regional Córdoba del Senasa, Gustavo Zabaletta y del supervisor de la región, Emiliano Bordas, quienes “nos informaron sobre los requisitos necesarios para la habilitación de la planta y para que la exportación fuera posible según las normativas vigentes. Gracias a esto pudimos adaptar la planta a este tipo de producto y hoy estamos realizando estos envíos”.
En nuestro país el cabrito es el tipo de carne caprina más consumida, se trata de una importante fuente de proteína, capaz de aportar, además, otros nutrientes. La carne de cabra, posee valores nutricionales similares, aunque al paladar resulte una carne un poco más fibrosa.