Este viernes, familiares y amigos de Nahuel Romero, adolescente fallecido en un siniestro vial ocurrido en la madrugada del día 16 de febrero, en intersección de bulevar Yrigoyen y Urquiza, marcharon nuevamente pidiendo justicia, mientras la causa está en su tramo final.
Por esta razón, ante algunos reclamos sobre la marcha de la misma, 03442 dialogó con el fiscal interviniente, doctor Fernando Martínez Uncal, quien explicó detalladamente como se fue desarrollando la Instrucción Penal Preparatoria (IPP), la atención permanente a los familiares de Nahuel y como se encuadra la imputación, esperando elevar a juicio en agosto próximo.
El hecho
Como se recordará, Romero iba de acompañante en una moto que circulaba de norte a sur y al trasponer la intersección con el bulevar, fueron colisionados a alta velocidad por un automóvil BMW, Adrián Rodríguez de 21 años, quien pese al pedido fiscal en audiencia desarrollada ante el juez de Garantías, doctor Gustavo Díaz, dispuso la libertad y que continuara el proceso en esa condición, lo que generó rechazo de los familiares y allegados de las víctimas.
Lo actuado
Según señalara el fiscal, tras el hecho se realizaron numerosas diligencias y peritajes, entre estas la toma de muestras de sangre de los protagonistas que determinaron que el conductor del auto no estaba alcoholizado, ni bajo influencia de estupefacientes, pero se confirmó que la velocidad en la que transitaba, superaba los 60 kilómetros por hora.
“El auto embistió la moto, situación que se agrava por superar la velocidad de circulación máxima permitida en más de 30 kilómetros por hora. Se trata de una esquina con semáforo, pero al estar con luz amarilla intermitente, los conductores deben trasponerla con mayor cuidado, por lo que se torna esto en conducción temeraria, ya que el máximo permitido en una encrucijada es de 30 Km/h, igual que todas las calles, por lo que estamos ante un homicidio culposo calificado y lesiones culposas calificadas.
Respecto a lo realizado en el lugar, Uncal explicó con lujo de detalles la intervención de los peritos con fotos y planimetría, procediéndose al secuestro de los vehículos cascos y otros elementos. También se localizó a testigos presenciales que declararon así como a los acompañantes del auto, relevándose las cámaras de seguridad de la zona con conocimiento de las partes, tanto defensa como querellantes, los que pidieron pericias mecánicas en el BMW, para determinar se estaba preparado para correr, lo que resultó negativo.
“Estamos eperando las pericias solicitadas por la Defensa, tras lo cual evaluaremos las mismas y se solicitará o no la intervención de los peritos policiales, teniéndose previsto tomar declaración nuevamente al imputado, ya que las velocidades determinadas por Querellas y Defensa, no coinciden con la de la Fiscalía. Respecto a la Querella, tiene una testigo que podría ser incorporada a la investigación. Este Código permite que las partes tomen testimoniales que si consideran necesarias, pueden incorporarlos como testigos en el juicio”.
Nunca se detuvo la investigación
El doctor Uncal fue claro al señalar que se llevaban tres meses de IPP y que esta se podía prorrogar 3 meses más, dada la complejidad del caso.
“El 27 de mayo se realizó una nueva audiencia con el juez de Garantías, donde se presentaron las pruebas realizadas y las que restaban. Por esto se autorizó la prórroga ordinaria y pensamos que así se completará la IPP en un plazo razonable para el caso, por lo que esperamos presentar en los primeros días de agosto, el requerimiento de elevación a juicio. En esta audiencia estuvieron presente los querellantes, doctores Ernesto Figún y Luis Hadad y los padres de la víctima fatal, quienes escucharon todo lo hablado. Los representantes de las víctimas adhirieron a los pedidos de la Fiscalía y no hubo denuncias de violación de las medidas de coerción al imputado, las que viene cumpliendo”.
No solicitaron la prisión preventiva
El fiscal, recordó que su solicitud de prisión preventiva fue denegada en su momento, pero aclaró que las querellas tienen la misma capacidad de requerir esta medida, pero en la oportunidad de la última audiencia, no lo hicieron y adhirieron a lo alegado por el representante del Ministerio Público Fiscal.
Atención a los padres
Uncal fue claro al señalar que al menos en tres oportunidades atendió a los padres de Nahuel, explicándole la marche del proceso y resaltó que tienen todo el derecho de cuestionar y requerir información, pero aseguró que se les dio toda la información y las puertas de la Fiscalía están abiertas en todo momento.
Respecto a la pena que podría solicitarse en juicio, aclaró que cada caso es diferente y es complicado comparar con otros siniestros, ya que sería inexacto, dado que hay diferentes factores, tanto en el siniestro como en los protagonistas.
“La pena a pedir no la puedo adelantar, pero va a estar dentro del marco legal de la conducción temeraria del Artículo 84 Bis, que prevé una pena de entre 3 y 6 años de prisión, lo que seguramente se tratará en debate oral”, explicó.
Finalizando, el fiscal considera que no habría posibilidades de ir a un juicio abreviado, por la postura firme de las querellas, por lo que habrá que esperar al menos un mes más para que se defina la IPP y se eleve a juicio.