La Asociación Educacionista La Fraternidad llega, este 14 de mayo, a su 143° aniversario

Cumple un año más la institución de jóvenes que supieron superar una situación crítica y convertirla en una iniciativa que dejaron como legado, y que sostiene su espíritu, enriquecido con nuevos desafíos y logros acordes a la actualidad, tales como cobijar a jóvenes extranjeros e incorporar a la mujer.

En el marco del aislamiento obligatorio, el presidente de la AELF, Dr. Héctor César Sauret, encabezará este jueves por la mañana una ceremonia virtual con fraternales y ex fraternales, autoridades y toda la comunidad de La Frater y de su hija, la Universidad de Concepción de Uruguay.

Esta celebración, atípica al respetarse las condiciones sanitarias obligatorias, se enmarca en un período de cuarentena durante el cual el Internado garantizó los servicios a la comunidad que permaneció allí. Asimismo, UCU garantizó la continuidad del calendario académico mediante su plataforma oficial y demás recursos tecnológicos regulados desde el Departamento de Educación a Distancia.

El nacimiento de una institución que es historia

Durante el gobierno del presidente Nicolás Avellaneda se decidió suprimir los internados en los colegios nacionales, y el gobierno entrerriano eliminó las becas provinciales a partir de 1877. Ambas decisiones provocaron preocupación ante la necesidad de generar soluciones para los alumnos de escasos recursos que querían continuar sus estudios secundarios en el Colegio del Uruguay.

Profesionales, estudiantes y ciudadanos resolvieron autoconvocarse en una nutrida asamblea, que se realizó el 14 de mayo de 1877 en el Teatro “1° de Mayo”, decidiéndose formar un internado que protegiese y diese albergue a los estudiantes. Así nació la Sociedad Educacionista La Fraternidad, institución protectora de los «indigentes en fortuna y ricos en inteligencia».        Fue elegido presidente José Benjamín Zubiaur, joven estudiante de la escuela de Derecho anexa al Colegio. En la presidencia de La Fraternidad, Zubiaur fue sucedido por Francisco Barroetaveña, retomando la conducción Zubiaur en 1879.